Las etiquetas RFID están cambiando la forma en que funcionan las operaciones de lavandería en todos los ámbitos. Estas envían información sobre la ropa y las sábanas a través de ondas de radio, haciendo posible el seguimiento automático sin la constante supervisión humana. Por lo general, estos pequeños dispositivos se cosen directamente en la tela o se adhieren de alguna manera a toallas y sábanas, para que cada pieza pueda ser procesada rápidamente y monitoreada a lo largo de todo su ciclo de vida en la lavandería. ¿Cuál es la mayor ventaja? Menos errores, ya que las personas ya no tienen que verificar manualmente todo. Según investigaciones provenientes de diversos sectores, cuando las empresas adoptan sistemas RFID, tienden a alcanzar una exactitud en el inventario del entorno del 95%. Para lavanderías grandes que manejan cientos o incluso miles de artículos diariamente, este nivel de precisión lo cambia todo. El personal dedica menos tiempo a buscar artículos perdidos o a contar dos veces el stock, lo cual les permite enfocarse en otras tareas importantes.
Saber cuándo elegir tecnología RFID en lugar de NFC marca toda la diferencia a la hora de seleccionar soluciones que se adapten a requisitos específicos. RFID significa Identificación por Radiofrecuencia y funciona desde una distancia mucho mayor que NFC, que significa Comunicación de Campo Cercano y requiere estar casi en contacto para funcionar correctamente con las etiquetas. Una gran diferencia radica en la cantidad de etiquetas que cada sistema puede leer al mismo tiempo. Los sistemas RFID pueden escanear varios artículos simultáneamente, lo cual explica su popularidad en lugares como lavanderías, donde es importante hacer seguimiento a muchos artículos. Por su parte, NFC generalmente se comunica con solo una etiqueta a la vez, algo que funciona bien para situaciones como pagos móviles en tiendas. También importan las diferencias de precio. Las etiquetas RFID suelen costar más dinero debido a su mayor alcance y características adicionales. Muchos profesionales creen que RFID ofrece una mejor relación calidad-precio en operaciones grandes, como la gestión de stocks de ropa de cama en hoteles, mientras que NFC sigue siendo la opción preferida para transacciones rápidas de pago en mostradores de tiendas.
Los hoteles están descubriendo que la tecnología RFID transforma la forma en que controlan artículos como sábanas y uniformes del personal, ya que les brinda información inmediata sobre lo que realmente está disponible en ese momento. Cuando los gerentes reciben actualizaciones inmediatas de este tipo, se reducen esas molestas discrepancias en el inventario que hacen perder tiempo y dinero en todos los departamentos. Al tener un buen control de lo que está en stock frente a lo que falta, los hoteleros también pueden planificar con mayor inteligencia. No terminarán comprando en exceso ni quedándose cortos, lo cual facilita en general la planificación financiera. Algunos estudios muestran que cuando los hoteles monitorean su inventario en tiempo real, se presentan menos situaciones en las que los huéspedes encuentran armarios de ropa blanca vacíos o el personal llega sin el equipo adecuado. ¿Y adivinen qué? Los huéspedes satisfechos tienden a regresar, por lo que esta pequeña mejora tecnológica termina generando un gran retorno en fidelidad del cliente.
Cuando los hoteles comienzan a utilizar tecnología RFID para sus operaciones, suelen experimentar grandes ahorros en costos laborales, ya que las revisiones de inventario ya no requieren trabajo manual constante. Algunos estudios del sector muestran que cuando los hoteles pasan a sistemas de inventario automatizados, generalmente ahorran alrededor del 20 e incluso hasta el 30 por ciento en gastos relacionados con el tiempo de personal. Menos trabajo manual significa un funcionamiento más fluido en el día a día, menos errores accidentales y los empleados pueden dedicar más tiempo a interactuar con los huéspedes, en lugar de estar ocupados con papeleo y conteo de existencias durante todo el día. El personal de recepción puede concentrarse entonces en asegurar que los huéspedes tengan una buena experiencia, en lugar de perder horas buscando artículos perdidos o corrigiendo errores en el inventario.
El seguimiento mediante RFID ayuda a reducir la pérdida de ropa de cama, ya que muestra exactamente qué elementos se entregan a huéspedes y empleados. Algunos estudios señalan una reducción de alrededor del 30% en las pérdidas de ropa de cama cuando los hoteles implementan estos sistemas, lo cual obviamente significa menos gasto en reemplazar sábanas y toallas desaparecidas. Con las etiquetas RFID, los gerentes hoteleros pueden vigilar de manera más precisa con qué frecuencia pasa la ropa por las lavadoras y ver realmente en qué estado se encuentra el inventario. Para la mayoría de los negocios dedicados a la hostelería, la inversión en tecnología RFID tiene beneficios múltiples. No solo ahorra dinero al evitar la constante compra de nueva ropa de cama, sino que también mejora la rentabilidad, ya que se reducen los recursos desperdiciados en reemplazar artículos que nunca deberían haberse perdido.
El ARIA Resort destaca en cuanto al uso de la tecnología RFID para hacer seguimiento de los uniformes en su inmenso inventario de aproximadamente 125.000 artículos, que incluye desde camisetas del personal hasta ropa de cocina. Cuando incorporaron la tecnología RFID en sus operaciones diarias, las cosas cambiaron bastante rápido. Las revisiones de inventario que antes tomaban días ahora se realizan en horas. Algunas investigaciones muestran que después de implementar la tecnología RFID, el resort redujo el tiempo dedicado a la gestión de uniformes en un 40 %. Lo interesante es cómo esta mejora se traduce en la práctica. Para los gerentes hoteleros que estén considerando adoptar sistemas similares, ARIA ofrece ejemplos reales de lo que puede lograrse con una correcta integración de RFID. El ahorro tanto en tiempo como en dinero es evidente, lo que lo convierte en una opción digna de considerar seriamente para quienes manejan grandes inventarios de uniformes.
Palace Resorts ha implementado la tecnología RFID en varios de sus establecimientos, lo cual ha mejorado tanto las operaciones como la experiencia de los huéspedes. Los sistemas RFID ayudan a seguir la ropa de cama y a gestionar mejor el inventario en todas estas ubicaciones diferentes, dando a los gerentes un control más claro sobre todo. Las puntuaciones de satisfacción de los huéspedes han subido bastante últimamente también, gracias en gran parte a una rotación más rápida de la ropa blanca posibilitada por estas etiquetas RFID. Al observar el éxito de Palace Resorts, queda en evidencia lo eficaz que puede ser la tecnología RFID cuando se implementa correctamente en hoteles y resorts. Está transformando la forma en que operan diariamente las empresas del sector hospitalidad, manteniendo al mismo tiempo la satisfacción de los huéspedes.
Royal Jersey Laundry ha implementado un sistema de seguimiento basado en la nube mediante RFID para sus operaciones de lavandería, lo que les permite mantener el control sobre todo, desde sábanas usadas hasta toallas limpias, a medida que se desplazan por las instalaciones. Con este sistema, los gerentes tienen acceso remoto a todos los datos que necesitan directamente desde sus dispositivos, lo que les ayuda a tomar mejores decisiones con mayor rapidez cuando surgen problemas durante los períodos más ocupados. Investigaciones indican que este tipo de sistemas de seguimiento reducen el desperdicio de materiales y aseguran que los recursos se distribuyan allí donde más se necesitan, algo especialmente importante cuando los volúmenes de lavandería fluctúan estacionalmente. Analizar cómo Royal Jersey ha integrado las etiquetas RFID con la computación en la nube muestra cuán significativa puede ser la diferencia que aporta la tecnología moderna en entornos hoteleros, mejorando no solo la eficiencia general, sino también reduciendo el impacto ambiental en múltiples propiedades de su red.
Para que los sistemas RFID funcionen correctamente en hoteles, es necesario que se integren bien con el software de gestión que ya esté implementado en el lugar. Cuando diferentes plataformas interactúan entre sí sin contratiempos, el personal dedica menos tiempo a buscar información en múltiples pantallas. La mayoría de los hoteleros descubren que un intercambio de datos más fluido reduce los esfuerzos duplicados y ahorra minutos valiosos a lo largo del día. Una investigación realizada por Hospitality Tech Review en 2022 reveló que los hoteles con una buena integración de sistemas experimentaron una mejora de aproximadamente un tercio en sus operaciones diarias. Por ello, al evaluar opciones de RFID, los directores hoteleros inteligentes no eligen únicamente la tecnología más llamativa disponible. Verifican si el nuevo hardware realmente se conecta con lo que ya han invertido, asegurándose de que potencie, en lugar de interrumpir, sus procesos de trabajo existentes.
Implementar sistemas RFID va más allá de simplemente instalar hardware. El personal necesita una formación adecuada para poder hacer que estos sistemas funcionen para ellos. Sin comprender cómo encaja todo, incluso la mejor tecnología no dará resultados. Las empresas también deben considerar la gestión del proceso de cambio al implementar algo nuevo como etiquetas RFID. Las personas naturalmente resisten lo que les resulta desconocido, pero una buena comunicación y apoyo marcan la diferencia. Cursos periódicos de actualización ayudan a los trabajadores a sentirse cómodos al escanear artículos, revisar niveles de inventario y resolver problemas conforme estos surjan. Las empresas que involucran a sus equipos desde el primer día suelen obtener mejores resultados, ya que los empleados ya no solo están siguiendo órdenes. Se convierten en parte de la solución, lo que significa que todos se acostumbran a trabajar con la tecnología RFID mucho más rápido que si esta fuera impuesta desde arriba.
Para pequeños hoteles que están pensando en adoptar la tecnología RFID, es muy importante hacer un cálculo adecuado de costos versus beneficios antes de tomar decisiones importantes. El propietario del hotel debe analizar los costos iniciales en comparación con lo que podrían ahorrar en el futuro en aspectos como horas de trabajo ahorradas y un mejor seguimiento de los suministros. Algunos estudios muestran que bastantes hoteles pequeños empiezan a recuperar la inversión en tan solo uno o dos años después de implementar sistemas RFID, debido a operaciones más eficientes. Al considerar el cambio, los gerentes harían bien en explorar diferentes opciones de pago adaptadas a empresas con presupuestos más ajustados. Existen algunos proveedores que ofrecen planes mensuales en lugar de tarifas iniciales elevadas, lo que facilita que establecimientos más pequeños comiencen a utilizar esta tecnología sin agotar sus recursos económicos.